Miguel Ángel Lara Sánchez
En el presente ensayo se expone la relación que
guardan las reformas energética y de telecomunicaciones aprobadas en 2013 con
el capital privado monopólico en nuestro país haciendo uso del enfoque de la
Crítica de la Economía Política. Por ello, se pone especial interés en el
carácter de la industria energética como factor esencial de la reproducción del
capital a escala general, así como de la rama de las telecomunicaciones en
tanto elementos determinantes de las condiciones generales de la reproducción
del capital, también a una escala social global que, puestos en manos de los
grandes consorcios, depositan en ellos los medios materiales que inciden en los
tiempos de producción, el tiempo de circulación y por lo tanto, en la
acumulación capitalista a través de la rotación del capital en su conjunto.
Private capital in the energy and telecommunications reforms.
The case of Mexico
In this essay
the relationship that the energy reforms and approved telecommunications monopoly
in 2013 with private capital in our country using the approach of the Critique
of Political Economy is published. Therefore, it places particular emphasis on
the nature of the energy industry as an essential factor in the capital reproduction
at a general level and branch of telecommunications as determinants of capital
reproduction general conditions, also at global social scale, placed in the
hands of big corporations, they deposited the materials elements that influence
production time, the circulation time therefore the capitalist accumulation
through capital turnover in its set.
I Introducción
La oleada neoliberal de los años ochenta que
privatizó importantes sectores de la economía de gran parte de los países
capitalistas tiene entre sus determinantes fundamentales la enorme sobreacumulación
de capitales que se produjo a fines de los años sesenta del siglo anterior y
que detonó en la crisis de 1970-1973. Incapaz de colocarse en la esfera de la
producción debido a la crisis y al estancamiento, este exceso de capital se
drenó a gran parte de los países subdesarrollados vía endeudamiento de los gobiernos,
lo que condujo a su vez a la crisis mundial de deuda a principios de los años
ochenta del siglo XX. Agotados los canales tradicionales de la especulación en
la esfera de la circulación del capital y limitada la posibilidad de colocación
de esta gran masa de capital en la producción de mercancías debido al período
de lento crecimiento económico tras la crisis de los años setentas, estos
excedentes empujaron a la mayor internacionalización del capital,
particularmente, a la abolición del mayor número de barreras existentes de las
economías nacionales y de sus mercados locales. Fue así que desde los primeros
años de la década de los ochentas del
siglo anterior tanto en las economías imperialistas como en las de escaso
desarrollo se produjeron los fenómenos privatizadores y la desregulación de
importantes empresas públicas.
Otro de los aspectos esenciales que explican lo
anterior lo tenemos en el proceso de maduración del capitalismo mundial hacia
sus fases de mayor dinamismo. La apropiación de grandes segmentos de la
producción y de la circulación del capital por el capital privado o individual,
desplazando la gestión estatal, se produce cuando las economías han concentrado
sumas muy grandes de capital en unas cuantas manos, lo suficientemente grandes
como para que emprendan negocios que requieren de grandes montos de capital
adelantado.
Así sucede con las ramas que integran las condiciones
generales del proceso social de producción, esto es, con los medios de
comunicación y de transporte, y con todas aquellas que juegan un papel
fundamental en la acumulación de capital a escala social.
II El desmantelamiento de la empresa pública
en los años ochenta y noventa del siglo XX
Estas dos grandes fuerzas se vieron alimentadas por
la necesidad del capital de contar con mercados más grandes tras la crisis de
los años setentas. No es casual, por tanto, que a partir de esta crisis general
se hayan acentuado los procesos de integración en Europa y en Asia Pacífico. El
proceso de conformación de los bloques económicos es, ante todo, un proceso de
centralización de capitales a gran escala, pero también de superación de las
barreras nacionales de los mercados locales para la conformación de mercados cualitativa
y cuantitativamente superiores. La firma del Tratado de Libre Comercio para
América del Norte (TLCAN) es la respuesta de la potencia hegemónica mundial,
los EUA, a los procesos de integración planetarios. Con este acuerdo se selló
la expansión del capitalismo norteamericano en su vecindad inmediata. Aceleró
lo que ya venía en proceso: un mercado regional para la valorización del capital,
pues ya antes de 1994 más del 75% de los productos norteamericanos entraban a
tasas arancelarias bajas.
De igual manera, nuestro país se convirtió en un espacio para la libre
circulación del capital norteamericano en los mercados financieros locales y en
otras áreas de la economía, con ciertos límites. En esa negociación del Tratado
quedaron fuera de la apertura importantes sectores, tales como los
hidrocarburos, la energía eléctrica, las telecomunicaciones (aunque algunos de
sus mercados como el de la telefonía celular ya estaba parcialmente abierto al
capital privado y extranjero) o el agua, que en ese entonces el gobierno en
turno de la oligarquía mexicana se reservó para su gestión.
Por el contrario, abandonaba el control de
importantes sectores de la producción de capital fijo, tales como la industria
siderúrgica, la minería o la producción de fertilizantes, por citar algunos de
los ejemplos más relevantes; asimismo, también depositaba en manos del capital
privado nacional y extranjero importantes segmentos de la agricultura que bajo
su gestión incidían en la relativa baratura de materias primas básicas para
toda la industria, pero que también repercutían en el valor de la fuerza de
trabajo, tales como los alimentos de la canasta básica, aunque su apertura
total se negociara en plazos. De esta forma, con la privatización de los años
ochenta y más tarde, en el marco de la negociación del acuerdo de libre
comercio, la oligarquía mexicana había decidido, adaptándose a la visión
geoestratégica de la oligarquía estadounidense, retirar al Estado el control y gestión de importantes
ramas económicas que garantizaban al conjunto de los capitales privados
márgenes superiores de plusvalía y de
ganancia, y la supresión de los obstáculos para el libre juego de la
especulación bancaria y financiera. Pero con ello también asestaba un fuerte
golpe a las clases trabajadoras porque estas medidas reducían drásticamente el
poder adquisitivo del salario.
III Las reformas en telecomunicaciones de 2013
En principio nos referiremos a las reformas en la
radio y las comunicaciones. Hasta antes de estas reformas, la penetración del
capital extranjero a las radiocomunicaciones estaba vetada. Con estos cambios
legales se permite la participación de aquél hasta en un 49% y se ofertan dos
nuevas cadenas de televisión. Asimismo, se permite la convergencia de las
comunicaciones digitales para la transmisión de voz, datos y video por los
capitales privados, la compartición de varios segmentos de la infraestructura
de transmisión de las señales, así como la transmisión de los canales de
televisión abierta en la televisión de paga, siempre y cuando sean de difusión
nacional y sean dominantes en el mercado.
Por lo que se refiere a las telecomunicaciones, lo
nuevo es que se permite la inversión extranjera en la telefonía fija, la
convergencia para ofertar productos de la comunicación integrada, siempre y
cuando el capital individual no sea dominante en el mercado, la compartición de
la infraestructura de transporte de las señales por el operador declarado
dominante en el mercado, la creación de una empresa estatal para brindar
transporte de señales, así como la fijación de precios por la entidad
reguladora del gobierno (el Instituto Federal de Telecomunicaciones, IFT) a los
capitales declarados dominantes, como los cambios fundamentales.
Sin embargo, el cambio fundamental se dio a
principios de la década de los años noventa del siglo anterior cuando se
privatizaron las telecomunicaciones. Esto representó el abandono por el Estado
de su papel esencial en el desarrollo de las condiciones generales de la reproducción del capital a escala global,
es decir, de aquellos medios materiales sin cuyo desarrollo se entorpece la
valorización de los múltiples capitales individuales y sin los cuales se
atrofia la acumulación de capital en escala ampliada. Exceptuando la existencia
de Aeropuertos y Servicios Auxiliares, ASA, tanto en el transporte carretero,
como el marítimo, aéreo, de ferrocarriles y de telecomunicaciones, todo se ha
ofrecido al capital privado, con lo que la participación del Estado como agente
fundamental en el desarrollo de estas condiciones generales materiales de la
reproducción se ha cancelado. Hoy estas condiciones generales están sujetas a
las leyes de valorización de los capitales monopólicos dominantes, es decir,
dependen de las variaciones cíclicas de la obtención de plusvalía de un
pequeñísimo número de empresarios que controlan esta industria. La lucha
encarnizada que protagonizan los Slim, Azcárraga, Salinas, el capital
norteamericano y el español, fundamentalmente, ha entorpecido el mecanismo
habitual de la acumulación a nivel nacional y con ello frenado el desarrollo
capitalista en el país. La solución que plantean las reformas a las leyes sobre
telecomunicaciones consiste en el reparto de estas condiciones generales de la
acumulación entre tres grandes monopolios, dándole entrada al capital privado
español como tercer gran jugador.
Con estas reformas se abaratará el costo de
producción de las llamadas y también se buscará rebalancear la distribución del
excedente producido entre los monopolios, así como elevar el tráfico telefónico,
con lo que se alienta la expansión de los capitales individuales y la escala de
su producción. Lo que no se garantiza es que estos cambios en los costos
terminen con precios más bajos al usuario final, lo que no es garantía de
mejoramiento del poder adquisitivo de las clases trabajadoras. Lo mismo tenemos
para el caso de los costos y precios de las señales de televisión.
Por lo tanto, una de las nuevas condiciones
generales de la producción del capital a escala social, así como de la
comunicación humana, la banda ancha, queda de nuevo al vaivén de la competencia
monopolística entre estos reducidos capitales. La nueva empresa estatal que
está proyectada para brindar servicios de transporte de señales no estará a
cargo de esta vital actividad, lo que augura un crecimiento por debajo de las
necesidades de la acumulación del capital a escala global.
En el desarrollo de los medios de comunicación y de
transporte está la base para la reducción del
tiempo de circulación del capital. Son ramas de la producción que se
extienden en la esfera de la circulación del capital o bien, son los medios
materiales de que se sirve la circulación de mercancías, de dinero y de servicios.
En este sentido, las reformas aprobadas para este sector en vez de acortar el
tiempo de circulación del capital en nuestro país, podemos afirmar que lo
aumentan, constituyendo otra de las palancas del freno a la acumulación, por
las siguientes razones: porque no resuelven la lucha monopólica entre las
grandes empresas, porque están sesgadas hacia la empresa que tiene una marcada
influencia en las sucesiones presidenciales y en las empresas de capital
extranjero; porque no alientan un entorno favorable para el aumento de las
condiciones que multiplican la productividad del trabajo en este sector, porque
ni por asomo establecieron un marco regulatorio para el desarrollo nacional de
la ciencia y la tecnología, porque no estimulan la participación colectiva de
los trabajadores para el desarrollo sustancial del sector y porque no tocaron
los cimientos del trabajo precario que aumenta de manera notable en estas
ramas.
IV La producción de hidrocarburos y de
energía.
Considerando la última información completa del
mercado petrolero mundial que publica la OPEP, que es para el año 2012,
Venezuela ocupa el primer lugar en
reservas probadas de crudo, con 297,735 millones de barriles (mb), seguido
de Arabia Saudita que tiene registrados 265,850 millones de barriles. México
ocupa el lugar número 16, con 11,365 millones de barriles, por debajo de
Algeria, que tiene 12,200 mb, Brasil, con 13,154 mb o Estados Unidos, que tiene
23,267 mb. En reservas de gas, los
primeros países son Rusia, con 48.67 billones de metros cúbicos estándar (bm3
std); Irán, con 33.78 bm3 std y Qatar, con 25.07 bm3 std.
México ocupa la posición 34, con 360 mmm3 std, por debajo de
Trinidad y Tobago (375), Brasil (434), Canadá (1,695) y Venezuela (5,563), considerando
únicamente nuestro Continente (ver Cuadro 1).
Pero como productores
de crudo los tres primeros lugares son ocupados por Rusia, con 10.043
millones de barriles diarios (mbd); Arabia Saudita, con 9.8 mbd y los Estados
Unidos con 6.505 mbd. México ocupa el décimo lugar con la producción de 2.547
mbd, antecedido por los Emiratos Árabes Unidos y por Venezuela, quien produce
2.88 mbd. En el onceavo lugar se encuentra Brasil, con 2.105 mbd. En la producción de gas natural Estados
Unidos, Rusia e Irán ocupan los primeros tres lugares produciendo 682.7, 609.2
y 202.4 miles de millones de metros cúbicos estándar (mmm3 std),
respectivamente. México se encuentra en el lugar 17, con la producción de 43.17
mmm3 std.
CUADRO 1. CRUDO Y
GAS. PRIMEROS LUGARES A NIVEL MUNDIAL Y POSICIÓN DE MÉXICO. 2012
|
LUGAR
MUNDIAL
|
RESERVAS PROBADAS
DE CRUDO mb
|
RESERVAS PROBADAS
DE GAS NATURAL mmm3 STD
|
PRODUCCION DE
CRUDO 1000bdp
|
PRODUCCION DE GAS
NATURAL mill m3 STD
|
1
|
VENEZUELA
|
297,735
|
RUSIA
|
48,676
|
RUSIA
|
10,042
|
EUA
|
682,719
|
2
|
ARABIA
SAUDITA
|
265,850
|
IRAN
|
33,780
|
ARABIA
SAUDITA
|
9,763
|
RUSIA
|
609,200
|
3
|
IRAN
|
157,300
|
QUATAR
|
25,069
|
EUA
|
6,505
|
IRAN
|
202,431
|
4
|
IRAQ
|
140,300
|
TURKMENISTAN
|
10,000
|
CHINA
|
4,109
|
QUATAR
|
157,050
|
5
|
KUWAIT
|
101,500
|
EUA
|
8,910
|
IRAN
|
3,739
|
CANADA
|
154,927
|
6
|
E. ARABES U.
|
97,800
|
ARABIA SAUDITA
|
8,235
|
KUWAIT
|
2,977
|
NORUEGA
|
114,570
|
7
|
RUSIA
|
80,000
|
EMIRATOS ARABES
|
6,091
|
IRAQ
|
2,942
|
CHINA
|
106,429
|
8
|
LIBIA
|
48,472
|
VENEZUELA
|
5,563
|
VENEZUELA
|
2,803
|
ARABIA SAUDITA
|
99,330
|
9
|
NIGERIA
|
37,139
|
NIGERIA
|
5,118
|
EMIRATOS A.
|
2,652
|
ALGERIA
|
86,454
|
10
|
KAZAJASTAN
|
30,000
|
ALGERIA
|
4,504
|
MEXICO
|
2,547
|
HOLANDA
|
78,150
|
11
|
CHINA
|
25,584
|
AUSTRALIA
|
3,849
|
|
|
INDONESIA
|
71,800
|
12
|
QATAR
|
25,244
|
IRAQ
|
3,158
|
|
|
TURKMENISTAN
|
64,890
|
13
|
EUA
|
23,267
|
CHINA
|
3,051
|
|
|
MALASIA
|
61,514
|
|
16 MEXICO
|
11,365
|
34 MEXICO
|
360
|
|
|
18 MEXICO
|
43,170
|
Fuente: Construido
con base en datos de OPEC. Annual Statistical Bulletin 2013. Austria.
|
De lo anterior deducimos que a esa intensidad de
producción, nuestro país tiene reservas de crudo para 12.2 años y en gas para 8.3
años, mientras que Brasil tiene reservas de crudo y gas para 17 y 25.6 años,
respectivamente. Este país tiene casi dos mil millones de barriles más de
reservas de crudo que México, pero la diferencia de años en las mismas es
notable, porque aunque teniendo un poco más de petróleo, la producción diaria
de Brasil es menos intensiva que la de México. En el caso de la producción de
gas la política brasileña es de conservación de sus reservas, pues produce
solamente 16,940 millones de m3 std.
En el caso de Venezuela, la diferencia de políticas
de explotación es notable con la de México. Con las reservas probadas hasta el
año 2012,
tiene reservas de crudo para 283 años y de gas, para 244.7 años. Esta es una
política energética notable en la
conservación de sus reservas, a diferencia de la política energética mexicana
que puede ser calificada de depredadora de los recursos no renovables, con tal
de cumplir las exigencias de abasto
reclamadas por la oligarquía estadounidense, como se puede constatar por
el destino de nuestras exportaciones: “el 76% del total de las exportaciones de
crudo fueron a Estados Unidos, 13% a España, 6% a India, 2% a Canadá, 1% a países del Convenio de San
José, 0.8% a China, 0.4% a Holanda, 0.2% a Portugal y 0.2% otros.”
En producción de refinados de petróleo, nuestro
país ocupa el 15º lugar, con 1.4 millones de barriles diarios (mbd), por debajo
de Venezuela, Canadá y Brasil, que producen 1.6, 1.9 y 2 mbd, respectivamente.
De estos 1.4 mbd que produce México, se exportan 146 mil bd pero se importan
601 mil bd, ocupando en este caso el 8º lugar mundial (ver Cuadro 2).
CUADRO 2.
REFINADOS. PRIMEROS LUGARES A NIVEL
MUNDIAL
Y POSICIÓN DE
MÉXICO. 2012
|
LUGAR MUNDIAL
|
PRODUCCION DE
REFINADOS 1,000 bd
|
EXPORTACION DE
REFINADOS 1,000 bd
|
IMPORTACIONES DE
REFINADOS 1,000 bd
|
1
|
EUA
|
18,490
|
EUA
|
2,698
|
SINGAPUR
|
2,167
|
2
|
CHINA
|
9,175
|
RUSIA
|
2,280
|
HOLANDA
|
1,909
|
3
|
RUSIA
|
6,436
|
HOLANDA
|
2,150
|
EUA
|
1,296
|
4
|
JAPON
|
3,748
|
SINGAPUR
|
1,731
|
JAPON
|
1,075
|
5
|
INDIA
|
3,487
|
ARABIA S.
|
862
|
CHINA
|
895
|
6
|
COREA DEL SUR
|
2,811
|
VENEZUELA
|
675
|
FRANCIA
|
889
|
7
|
ALEMANIA
|
2,110
|
KUWAIT
|
661
|
ALEMANIA
|
617
|
8
|
BRASIL
|
2,064
|
INGLATERRA
|
558
|
MEXICO
|
601
|
9
|
ARABIA S.
|
1,927
|
ITALIA
|
544
|
|
|
10
|
CANADA
|
1,906
|
CHINA
|
524
|
|
|
11
|
IRAN
|
1,774
|
IRAQ
|
472
|
|
|
12
|
ITALIA
|
1,607
|
CANADA
|
467
|
|
|
13
|
VENEZUELA
|
1,568
|
QATAR
|
465
|
|
|
|
15 MEXICO
|
1,416
|
25 MEXICO
|
146
|
|
|
Fuente: Construido con base en datos de OPEC. Annual Statistical Bulletin 2013. Austria.
|
En Pemex
existe un proceso deliberado de
desacumulación de capital, que se refleja en los grados de obsolescencia de
su planta industrial en general, la escasa inversión y la necesidad de importar
cada vez un porcentaje mayor de productos petrolíferos. Los considerandos que hace
la Presidencia de la República para tratar de justificar la mayor cesión de
procesos parciales de trabajo de la cadena de los hidrocarburos a los capitales
privados no hacen sino evidenciar lo anterior: “Hace 15 años importábamos 25% de
las gasolinas y 41% de los petroquímicos que consumíamos. En 2012 se importaron
49% de las gasolinas y el 66% de los petroquímicos.” De
la misma forma, la confesión de que harían falta 60 mil millones de dólares
anuales de inversión para modernizar esta empresa no hace sino revelar el
saqueo y el abandono. Sin embargo, a pesar de este estrangulamiento, la
producción de crudo es una de las actividades que más excedentes genera, pues
mientras que el costo de producción de un barril de crudo es de aproximadamente
23 dólares para el año 2012, la plusvalía que se obtiene alcanza los 80
dólares, es decir, que por cada dólar gastado en capital constante consumido y
en capital variable, se obtienen 3.47 dólares de excedente, lo
cual significa un gran margen de excedente producido, y eso tomando en cuenta
las propias cifras oficiales.
La
industria petrolera es clave en la
producción de energía para el capital social global y constituye la base
para la existencia y reproducción de una variada serie de ramas productivas.
Asimismo, Pemex y los consorcios privados alojados en la producción de
petroquímicos tienen una fuerte incidencia en la fijación de los precios de
estas materias primas fundamentales para todo el capital social global, con lo
que son sujetos determinantes en la tasa media de ganancia, aunque la política
petrolera actúe en contra de Pemex mismo, pues, como pudimos observar de la
información anterior, existe una sobreexplotación de estos recursos no
renovables cuyos excedentes van a parar al pago de su deuda, que representa el
41.2% de sus activos totales, a engrosar las arcas del gobierno federal,
representando el 38% de la recaudación total para el año 2012,
pero el 56.1% de los ingresos totales de la paraestatal. Así pues, a pesar de
que esta empresa pública genera una gran cantidad de excedente, éste va a parar
casi en su totalidad al gasto parasitario del gobierno federal, al pago de su
deuda y a la corrupción formal e informal.
Muy poco
es lo que las clases trabajadoras de nuestro país alcanzan a beneficiarse de
tales excedentes. Sólo de manera indirecta, pues el saqueo a través de la
recaudación tributaria sería mayor en caso de que ese 38% de los ingresos
petroleros no llegara a sus manos o bien, disminuiría el gasto social que hace
el Estado.
Por lo
que respecta a las reformas en el sector eléctrico, se flexibiliza el acceso
del capital privado en la generación de energía eléctrica y se le permite la
participación en la red nacional de transmisión y en las redes generales de
distribución, con lo que actuarían sobre toda la cadena de producción, distribución
y venta de la energía eléctrica, además de la apropiación por el capital
privado de la fibra óptica existente en este sector. Para que estas reformas
pudieran ser aprobadas sin mayores contratiempos, los administradores de los
intereses comunes de la oligarquía durante el sexenio anterior tuvieron que desaparecer
a la empresa encargada del suministro de la energía eléctrica en el centro del
país, Luz y Fuerza del Centro, asestando
así un duro golpe al Sindicato Mexicano de Electricistas en una de las formas
más despiadadas y de odio clasista como no se habían visto en los últimos 50
años.
Y como en
el sector eléctrico, lo mismo ocurre con las reformas en la rama de los
hidrocarburos. El fin principal consiste en dejar en manos del capital privado monopólico
un mayor número de procesos parciales de trabajo que integran la rama y que
hasta el momento no estaban bajo su control. Es un hecho que desde hace varios
años ya existían en nuestro país los personajes con suficiente capital concentrado
como para reclamar al Estado la transferencia de esas empresas que requieren de
grandes masas de capital, como lo prueban las plataformas marinas propiedad de
la familia Slim, o los grandes capitales norteamericanos, españoles o europeos
que se disputan el mercado.
De esta
forma, el Estado deposita en el capital privado de alta concentración importantes palancas del desarrollo de las
fuerzas productivas que pueden conducir a una mayor división social del trabajo,
pero por la ausencia de un marco normativo para el capital privado que potencie
aquellos elementos determinantes de la productividad del trabajo, lo más
probable es que se limite a una reforma que ponga en manos de la oligarquía los
resortes esenciales que le faltaban controlar para incidir en la tasa media de
ganancia pero, sobre todo, para la apropiación de grandes sumas del excedente
que hasta hoy van a parar a las arcas de los gobiernos en turno. A diferencia
de lo que ocurre en otros países, en que parte del excedente petrolero se
destina al desarrollo capitalista y al gasto social, y con ello al salario vía
prestaciones sociales, las reformas energéticas no pasan de ser una promesa de
dudosa realización en este sentido.
Con estas
reformas el Estado Mexicano se desprende de mayores segmentos de incidencia y
control sobre la reproducción del capital a escala global para arrojarlos al
apetito voraz del capital monopólico privado, que ha probado ser muy
ineficiente en este sentido, dado el virtual estancamiento del proceso de
acumulación por décadas. Pierde terreno en el control del tiempo de producción y en el tiempo
de circulación, y por tanto, en la rotación
del capital social en su conjunto,
pues no sólo hay que considerar su retiro de las telecomunicaciones (incluyendo
la televisión) y de segmentos importantes de la energía, sino además del
traspaso al capital privado de importantes sumas de los ahorros de los trabajadores
con la reforma al Infonavit, su tercera empresa en importancia, y la
desaparición de las empresas públicas de transporte aéreo, Mexicana y
Aeroméxico, entre 2005 y 2007. También ha renunciado al control de sectores
básicos de la economía que contengan la pérdida de poder adquisitivo de las
clases trabajadoras y la pobreza extrema en el país.
8 de
abril de 2014
“Ahora bien, más del 75% del comercio entre México y Estados Unidos se
realizaba prácticamente libre de aranceles antes de la entrada en vigor del
TLCAN. Ello llevó a muchos expertos a caracterizar al Tratado más como de
inversiones, que de Comercio.” Álvarez
Béjar,
Alejandro y Martínez
Aguilar,
Sandra. Significados del
Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) para México.
http://www.redem.buap.mx/word/alejandro2.doc [consultado el 23-XI-2013].